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01–02-06 luz+luz
“La fábula de Cristo”
Luigi Cascioli nació en 1934. Es
el autor de la demanda, en Italia, que pone en tela de juicio la
existencia de Jesucristo. El tema no es nuevo. Nosotros hemos
incursionado en él, e incluso llegamos a entrevistar al Sr. Luis
Montás, Presidente Secretario General del Partido Comunista de la
República Dominicana (Pacoredo), que puede decirse que como
dominicano, es uno de los que más han incursionado en el tema
describiendo al tal Jesucristo como un invento sincrético, que nunca
existió sino como eso, como un invento sincrético, como un
sincretismo.
Cascioli es un ex estudiante a
sacerdote católico, autodidacta en temas religiosos, estudioso de
libros sagrados, agrónomo, propietario de una empresa constructora y
hoy jubilado. En diálogo con El Tiempo de Italia, expuso sus
polémicas razones, a través de una entrevista que le hiciera este
periódico, lo que fue publicado en el mes de enero de este año 2006
en Internet.
La primera pregunta fue ¿qué
persigue con la demanda?, a lo que respondió categóricamente:
“Terminar con el cristianismo porque nos ha llevado al oscurantismo
y está contra el progreso y la evolución. El cristianismo ha sido
negativo en todos los sentidos para la humanidad y se ha basado en
puras mentiras. Si libro a la sociedad de este mal, sería un favor
para la futura generación.”
¿Qué quiere demostrar con el
proceso contra Jesús?, fue la siguiente pregunta a la que respondió:
“En mi libro 'La fábula de Cristo' demostré que Jesús no existe. Mi
objetivo es tener una sentencia que confirme esta tesis. Si Cristo
no existió, automáticamente cae la Iglesia porque no puede demostrar
la crucifixión de alguien inexistente. No existe el cuerpo
(refiriéndose al cuerpo del personaje mitológico Jesús), ni hay
tampoco el pecado original, ni la eucaristía, ni el pan de Cristo y
la teología se derrumba. Esto significa que la Iglesia está basada
en nada”, basada en mentiras diríamos nosotros.
Y antes de continuar quisiéramos
apuntar lo siguiente, que más que refutación a Luigi Cascioli, se
trata de un complemento a esta respuesta dada por Cascioli a la
pregunta anterior, que no deja de ser, lo publicado como respuesta,
posible víctima de la manipulación periodística y de ahí su
unilateralidad.
Para combatir eficazmente a la
religión, es preciso conocer su esencia y esto significa conocer su
origen en la sociedad humana y su desenvolvimiento en el seno de las
diversas sociedades divididas en clases. Por eso, sólo el marxismo,
el materialismo dialéctico, porque resuelve científicamente la
relación entre el ser y el pensar, es el que conduce, el que guía a
la práctica social en todas sus formas, es decir, no sólo a que la
práctica social alcance avances tales en el desarrollo de los
instrumentos de producción y los conocimientos científicos que
expliquen los fenómenos de la naturaleza y nuestra existencia como
parte de esos fenómenos, sino que es el que explica exactamente las
leyes que rigen las relaciones entre los hombres en la sociedad y
por tanto transformar la sociedad hasta hacer desaparecer las clases
sociales, que es la relación entre los hombres que se corresponde
con el grado de desarrollo de las fuerzas productivas y el
desarrollo tecnológico actuales, y no es hasta que esta práctica
social logre alcanzar estos objetivos, que de manera definitiva, se
logre hacer desaparecer las supersticiones y las creencias en
falsedades probadas, como lo es el cristianismo y como lo son las
religiones en general.
Otra pregunta formulada a Luigi
Cascioli, autor de la demanda que pone en tela de juicio la
existencia de Jesucristo, fue: ¿Por qué hace la denuncia contra un
párroco y no contra el Papa? Y éste contestó: “No tengo nada
personal contra él. Pero él es autor de un boletín parroquial que
habla de Jesús como hijo de José y María. Y ésa es la prueba que
necesitaba para llevar el caso a un Tribunal”, por abuso de la
credibilidad popular con el fin de persuadir de la existencia de
hechos falsos, o la historicidad de acontecimientos que nunca
sucedieron, como explicara anteriormente. Y agregó: “Las altas
autoridades eclesiásticas tienen inmunidad, el proceso cuesta menos
en mi ciudad, si demuestro que Cristo no existió allí, el resultado
es el mismo.”
Por último, se le preguntó a
Cascioli: ¿Qué futuro tiene la causa?: “La nueva audiencia será el
27 de enero en Viterbo. La ley italiana está sometida al Vaticano,
los jueces no son objetivos, buscan modos para terminar con el
proceso y en forma ilegal lo boicotean. No espero que me den la
razón y emitan una sentencia sobre la inexistencia de Dios. Pero
después haremos un recurso en el Tribunal de La Haya. Este es un
país conservador y ultracatólico, económicamente estoy solo, pero
tengo miles de sostenedores en Italia y en el resto del mundo. Mi
lista electrónica tiene más de 3.500 personas que aumentan cada día.
Me compran mis libros y me dan apoyo moral.” |