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12-02-06 luz+luz
“A clases se va a aprender, no a creer”
Lo que está
sucediendo en el mundo en contra de la superchería, la intolerancia
y el oscurantismo religiosos, en particular del cristianismo,
experto, sin duda alguna, en inventar cosas y hacerlas pasar por
hechos reales; en contra de la opresión, la expoliación, la
explotación y el parasitismo de los pueblos de parte de las
potencias imperiocapitalistas y sus consorcios monopolistas a través
de su llamada globalización, al servicio de quienes están y por los
que aún sobreviven todas las supercherías y el oscurantismo
religiosos, y, al mismo tiempo, el auge que va tomando la lucha a
favor de la ciencia, que todo el mundo sabe que es un sistema de
conocimientos ordenados, cuya veracidad, contrario a los inventos
religiosos, que son una representación tergiversada y fantástica de
la realidad, se comprueba y se puntualiza constantemente en el curso
de la práctica social, en todos los tipos de práctica social, y de
ahí el prestigio que hoy día tiene la ciencia y el afán de sus
adversarios de tratar de descalificarla haciendo pasar por ciencia
lo que no lo es, movimiento éste que la prensa mercenaria de nuestro
país oculta en una soez conspiración de silencio, como si el
movimiento dejara de existir porque ellos, como avestruces, oculten
todo lo que está aconteciendo en el mundo; cuenta, este movimiento,
con un frente vigoroso también en nuestra América, y para avalar lo
que nos decían nos han hecho llegar estos radioyentes informaciones
procedentes de diferentes países de América relacionadas con el
mismo.
Nos gustaría dárselas a conocer
comenzando por la siguiente, que es un buen ejemplo de cómo se
proyecta en nuestra América esta lucha y de la sintonía con el
compás que siguen los acordes más avanzados y científicos de los
tiempos, que en este sentido marcamos los sectores dominicanos que
de manera activa nos hemos lanzado al ruedo de la lucha contra la
superchería en general, la intolerancia religiosa, el cristianismo,
la opresión y la explotación y a favor de la ciencia. Este artículo
escrito por Lisandro Duque Naranjo, que lleva por título “La cosa se
está poniendo templaria” y que fue sacado de Internet el sábado 4 de
febrero de este año 2006, del portal de Internet llamado El
Espectador, detalles que les suministramos para que si se
entusiasman procuren el artículo in extenso.
El trabajo trata sobre lo que está
sucediendo en Colombia en estos momentos a propósito de que por
decreto se pretende imponer las clases de religión en las escuelas y
colegios de ese país. Por supuesto que no ha sido reseñado por la
prensa dominicana, ni el artículo ni la información sobre la que se
basa, prefiriendo esta prensa hacer el ridículo, como lo hiciera el
sábado 4 de febrero de este año 2006 el suplemento dizque cultural
llamado Areíto del periódico Hoy, dedicándole toda una página, en
especial, bajo la divisa de cristianismo y progreso, al disparate,
que ni ellos mismos se lo creen, de que el cristianismo es una
religión que deja una huella inconfundible en el desarrollo de
occidente. ¿Acaso ha podido pasar de contrabando en el texto de la
constitución europea, que el cristianismo sea parte de los cimientos
de la cultura occidental? Las dos veces que ha sido discutida la
propuesta de este adefesio antihistórico por presiones del Vaticano
católico y sus socios y a través de vasallos suyos, ha sido
rechazada. Por eso decimos que ni ellos mismos se lo creen. Debemos
advertir, desde ya, que la refutación a ese catecismo sobre
supuestos hechos históricos que nunca sucedieron como ellos los
presentan, es una brillante oportunidad para amarrarlos con su misma
soga, pero eso lo haremos más adelante. Escuchen ahora el artículo
al que hemos hecho referencia:
dice Lisandro Duque, su autor:
“Muy confusos son los argumentos
de quienes quieren —y parecen estar lográndolo— que se reimplanten
por decreto las clases de religión en los colegios, en Colombia: …
Muerto el Concordato —ese esperpento decimonónico (decimonónico
quiere decir del siglo XIX, y de manera despectiva pasado de moda o
anticuado), ese esperpento decimonónico, repetimos, que sometió al
país (recuerden que se refiere a Colombia) a la férula católica
durante todo el siglo XX -los dominicanos sabemos, por desgracia,
por padecimiento propio, lo que es ese esperpento que enajena la
salud de los pueblos y de la naciones, ese esperpento cristiano
católico al que se le llama Concordato-, el clero –continúa diciendo
Duque Naranjo- había dejado de ser tan omnipresente en la vida
nacional, pero de un tiempo acá ha comenzado a envalentonarse de
nuevo. La ofensiva de las sotanas, sin duda, se debe al superávit de
altos funcionarios del Gobierno miembros del Opus Dei —adeptos de
Escrivá de Balaguer, siniestro inspirador de los peores tiempos del
franquismo—, y de personajes palaciegos que no pasan por las afueras
de ninguna iglesia sin persignarse, comenzando por el propio
Presidente de la República”, se refiere al presidente de Colombia
Álvaro Uribe. “Y por supuesto ese exhibicionismo mojigato ha hecho
carrera: aquí ya la Virgen se le aparece a cada rato a la gente, por
los motivos más triviales y en los lugares más disímiles: en las
paredes húmedas de las casas humildes y en los tarjetones
electorales. Se ha puesto de moda encomendarse a Dios, de manera
ostentosa, ante cualquier fruslería. Se abusa de un teologismo
ordinario por parte de deportistas, faranduleros, paramilitares y
políticos. La santidad se ha convertido en la fase superior de la
drogadicción, y por eso se reincide tanto en ésta”.
Antes de seguir debemos
reiterarles que no se trata de adaptaciones nuestras, cualquier
parecido a nuestras posturas y forma de expresarlas, ciertamente, no
son puras coincidencias, pero lo cierto es que estamos citando
textualmente.
Prosigamos. “Los criminales son
confianzudos con Dios y lo han vuelto un ser de lavar y planchar.
Los condenados por corruptelas y negociados salen de las cárceles,
Biblia en mano, a predicar la palabra y a enseñarnos a los honrados
a ser buenos”. Y pone como ejemplos: “El Fiscal General fue a
pagarle promesas, por su nombramiento, al Milagroso de Buga. Antonio
Navarro y Angelino Garzón resultaron yendo a misa después de viejos.
Demasiado arrepentimiento para mi gusto”. Aquí en este nuestro país
no sólo que dios lava y plancha los delitos sino que los prelados
cristianos van ellos mismos a las cárceles a ofertar sus servicios
de limpieza e impunidad.
Pero bien, prosigamos con el
artículo del colombiano Duque Naranjo publicado en Internet: “Dios
se volvió un objeto de consumo y acceder a su gloria es menos
complicado que la tenencia de un celular. El Creador está en ganga.
Ante semejante auge de falso y demagógico misticismo, obviamente,
nuestra clerecía ha recuperado su beligerancia, reverdecido sus
nostalgias concordatarias y reactivado sus intromisiones en
intimidades que no le atañen, como la del aborto, por ejemplo, pues
sus miembros son célibes y en ese tema no conocen de la misa la
media. El eje Vaticano-Bogotá les prohibe a los homosexuales armar
pareja y ordenarse sacerdotes, pero no sanciona a los prelados que,
aprovechándose de su investidura, incurren en pederastia.
“Hay mucha beatería sospechosa
suelta por ahí. Confesionalismos de toda laya se disputan el mercado
de las almas, por radio, por televisión, en antiguas salas de cine,
en quioscos de barrio y en iglesias. Circulan, como arroz, el
anatema, el discurso inflamado y el pavor al infierno. “La oferta
del viaje seguro al cielo les gana en clientela a las excursiones a
Buenos Aires. Otro sermón más y nos instalamos en el medioevo. Pero
bueno, hay libertad de cultos y a sobrellevar todo eso, se dijo.
¿Qué más se hace?”. ¿Qué le vamos a hacer?, sería la expresión de un
dominicano. Pero, y aquí el autor de la ironía y el sarcasmo pasa a
ser enfático, preciso e innegociable en su postura, que ha sido la
nuestra todo el tiempo: “a los colegios sí que no les lleven esa
cruzada. ¡Qué a clases se va es a aprender, no a creer!” |