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26-02-06 Luz+Luz
Guerrilla cultural imperio-capitalista
Un dibujante de caricaturas danés,
es decir, nacido en el país llamado Dinamarca, cuyos antepasados son
los vikingos y ubicado este país en la parte norte de Europa
ocupando casi la totalidad de la península de Jutlandia, en el Mar
del Norte, se prestó a hacer las veces de francotirador provocador,
de lo que se ha dado en llamar guerrilla cultural, que es como hoy
se le llama a la campaña ideológica por parte de los países
imperiocapitalistas, hegemonizados por los Estados Unidos, que junto
con los de la Unión Europea y la Iglesia Católica vaticanista,
forman una coalición de agresión desde Occidente, de tipo cultural,
religioso y militar contra los países de Medio Oriente y Asia en
busca de alcanzar una dominación plena y absoluta de estas regiones,
como sería el invadir a Irán y Pakistán, a Corea del Norte y que
incluiría a Cuba y Venezuela aunque estos países están en América;
guerrilla cultural que hace recordar esa otra, organizada también
por el imperialismo norteamericano, llamada Guerra Fría después de
la Segunda Guerra Mundial y que acompañó a una caza de brujas
anticomunista, denominada en los Estados Unidos macartismo.
Por ejemplo, en la década del ’50
del siglo XX, las películas norteamericanas eran anticomunistas.
Quien haya leído novelas de espionaje durante la época de la Guerra
Fría (o Paz Armada como la llaman algunos historiadores), sabe que
solía abundar la teoría del “topo” (un agente infiltrado en las
filas de Occidente, parte de su sociedad, involucrado en las altas
esferas, pero que en realidad trabajaba para el diablo de Oriente).
La idea, entonces, era que el enemigo podía estar oculto entre la
población, esperando el momento adecuado para atacar... Las
películas eran desde la ficción un claro reforzamiento de toda esta
campaña anticomunista. Y hoy se alude al mismo “topo”, pero la
compaña ahora es contra el terrorismo, y se le llama terrorista a
todo el que pretenda rebelarse contra la dominación
imperiocapitalista norteamericana.
No ha sido pura casualidad el
hecho de que estas caricaturas salieran a la luz pública después de
la visita de Condoleezza Rice por Europa y que el papa Ratzinger,
Benedicto XVI, por su parte, emitiera su Encíclica “Dios es amor”,
como si el dios cristiano fuera tolerante, y no haya sido la
justificación de los crímenes y genocidios más atroces y horrendos
en contra de la humanidad y que han estremecido al mundo entero.
Pero lo que no esperaban los
centros ideológicos y propagandísticos al servicio del capital
monopolista internacional, es que las cosas, como ha sucedido, se
les salieran de las manos, y en vez de servir las caricaturas para
obstaculizar la lucha de estos pueblos en contra de la agresión y el
saqueo de que son víctimas, por su autodeterminación, pretendiendo
desacreditar esta lucha presentándolos como intolerantes y salvajes,
amparándose en el fundamentalismo musulmán cuya intolerancia le
proviene de la influencia judeocristiana que tiene el Islam, hoy los
pueblos musulmanes lo que están es movilizándose de manera masiva,
no por las caricaturas, cuya provocación pasó a un segundo plano,
sino que partiendo de esta nueva agresión, esta vez de parte de la
guerrilla cultural imperio-capitalista, se están movilizando en
contra de la agresión cultural, militar, política y económica
imperialistas. |